martes, 22 de septiembre de 2015

Un Viaje de Locos!!!...



Mi marido es super fan de David Gilmour, así que cuando se entero de que este iba a estar de gira por Europa, trató por todos los medios de conseguir boletos. El esperaba que viniera a Suecia, pero no estaba dentro del itinerario de la gira. Su primer intento fué conseguir boletos para Londres, cuando vió la venta en internet aplico para comprarlos, pero en menos de 6 minutos los boletos se había agotado. Luego lo intento para Amsterdam, pero con la misma suerte que en el anterior, se agotaban en segundos. Hizo entonces el intento para Oberhausen Alemania, en su prmer intento se atasco el sistema y el pensaba que ya no iba a lograrlo, pero al volverlo a interntar por segunda vez...BINGO!!!

Ya teníamos boletos, ahora teníamos que planear como ir hasta allá. Primero pensamos en irnos en coche, tomar el Ferry y llevarnos a Gilmour con nosotros. Pero la verdad, eran muy pocos días para tanto trayecto. Así que, decidimos dejar a Gilmour con nuestra amiga Nora y nosotros viajar en avión.
No hay aeropuerto en Oberhausen, por lo que tendríamos que volar a una ciudad cercana llamada Dusseldorf.

                                             Dusseldorf, Alemania.

Sería un viaje corto, saldríamos el sábado a las 9:30 de la mañana y regresaríamos el domingo a las 6:30 de la tarde. Decidimos rentar un carro para hacernos la vida mas fácil.

Al llegar a Dusseldorf, recogimos el auto y nos fuímos a dar una vuelta por la ciudad, comimos y bebimos algo antes de tomar camino a Oberhausen. Nos enteramos que había un lugar que se llama Wildpark, es algo así como un mini zoológico donde crían algunas clases de venados, mapaches, jabalíes y gatos salvajes. Nos fuimos para allá, ya saben...yo y los animales!!!


                                                            Wildpark

Es un lugar pequeño, pero los animales están verdaderamente cerca de las personas y niños, quienes les dan de comer practicamente de la mano. Fue muy lindo estar ahí.

Llegó la hora de tomar camino a Oberhausen, un trayecto de poco mas de 45 minutos. Las carreteras alemanas son impresionantes, bien pavimentadas, amplias y bien señaladas. En el carril de alta velocidad, todo el tiempo ves pasar grandes y poderosos autos; Ferraris, Porches etc... Se nota la calidad de vida del país.
Llegamos al hotel. La ciudad de Oberhausen es pequeña, del tipo de ciudad industrial. Descansamos un par de horas y nos preparamos para ir al concierto de David Gilmour.
El lugar del concierto, es normalmente una pista de hockey, que también hace las veces de auditorio. Un lugar techado, parecido a nuestro Palacio de los Deportes en tamaño.

Y comenzo el concierto. Gilmour, es un hombre de pocas palabras, así que solo hablo 3 veces durante el concierto; una para saludar, otra para presentar a sus músicos y la última para despedirse. El se dedico a hacer lo que sabe hacer...tocar maravillosamente!!!.
Toco algunas canciones de su nuevo disco, el que por cierto esta muy bueno, pero también toco sus éxitos de siempre. Un concierto redondo.
Cuando llegamos al estadio, quisimos comprar nuestras camisetas oficiales del concierto y un programa del mismo. Un gentio de locura, Ernesto, como pudo, llego hasta el frente para pedir las camisetas, y que creen???, No recibían TARJETA!!!. No lo podiamos creer!!!. En Suecia pagas todo con tarjeta, hasta en los puestos callejeros que venden fresas  jajajajajajajaja  Así que pues, nos metimos al conciertos un poco frustrados, la verdad.
Fuímos de los primeros en salir, así que mi querido esposo me dijo:
  Esperame aqui, voy a conseguir un cajero y tratar de volver a entrar a comprar las camisetas y el programa.
Yo me quedé ahí esperando muy obedicnte. Pasados 5 minutos, solo lo ví pasar corriendo de regreso y meterse de nuevo al estadio. Ya cuando lo ví salir con una sonrisa de oreja a oreja, entendí que el que persevera alcanza. Había comprado 2 camisetas, pero ya no alcanzo programa. Ibamos bajando las escaleras, cuando llego un señor con Posters de Gilmour, no tendríamos programa, pero si un poster.
                                   Poster de David Gilmour con nuestras entradas al concierto.


El estadio está junto a una plaza comercial llena de tiendas, bares y restaurantes. Una vida fantástica la que tiene este lugar. La gente estaba contenta y todos los lugares se abarrotaron con las personas que ibamos saliendo del concierto. Nos metimos en uno que nos llamo la atención a cenar.
Regresamos al hotel a dormir, estabamos cansadisísimos y al otro día habría que levantarse temprano. Queríamos aprovechar el tiempo e ir a Köln.

Nos levantamos, bajamos a desayunar y salimos para Köln. Köln está a 45 minutos de Oberhausen y no nos quedaría lejos para regresar a Dusseldorf a tomar el avión.
Llegamos a Köln y nos dirigimos a su principal atractivo; la Catedral.

                                                       Catedral Köln

Es la Catedral Gótica con las torres mas altas del mundo. Una belleza de arquitectura, lástima que este tan sucia.
Subímos a una de sus torres para tener una vista impresionante y tomar fotos. 535 escalones, en un espacio diminuto y por una escalera de caracol. Se dice fácil, pero uno va dejando los pulmones al subir peldaño tras peldaño.

A bajar entramos a la catedral, es hermosa. Como es nuestra costumbre compramos una vela, la encendimos, pedimos por nuestros seres queridos y dimos gracias.

Afuera se pone diferentes tipos de músicos callejeros, estuvimos ahí un momento disfrutando de la gente. Nos fuímos a sentar a un restaurante que esta enfrente, tomar algo, descansar un poco; se acercaba el momento de tener que tomar camino rumbo al aeropuerto.

Llegada la hora, nos fuímos a el aeropuerto de Dusseldorf para nuestro regreso.

Un viaje express, una excentricidad de nuestra parte talvez, pero valió la pena segundo a segundo...